NEMATODOS
Forma infectante
Mecanismo de infección
Sitio de Infección
Áscaris lumbricoides
Huevo embrionado con larva L3
ingestión de huevos por alimentos o tierra contaminados con heces
Intestino delgado; migración de larvas por los pulmones
Trichuris trichiura
Huevo embrionado con larva L2 .
ingestión de huevos por alimentos o tierra contaminados con heces
ciego del colon
Uncinaria (Ancylostoma duodenales y Necator americanus)
Larva filariforme (L3 )
Las larvas de la tierra penetran la piel
Intestino delgado; larvas a través de piel y pulmones
Strongyloides stercolaris
Larva filariforme (L3 )
Las larvas de la tierra penetran la piel y en raras ocasiones hay autorreinfección interna
Intestino delgado; migración de larvas por los pulmones
Enterobius vermicularis
huevo, Larva filariforme (L3 )
ingestión de huevos; autocontaminación por comportamiento anal-oral
Interior del ciego del colon
Áscaris lumbricoides
forma ciliada de 5 milimetros de diametro,
machos y hembras diferentes en tamaños, donde los machos son de 15 a 20 cm y hembras de 2 a 30 cm
MACHO
15 a 20 cm
paste posterior
HEMBRAS
20 30 cm
Trichuris trichiura
Uncinaria
Strongiloides estercolaris
Enterobius vermicularis
Diagnóstico
El diagnóstico específico consiste en demostrar la presencia de huevos característicos (en las heces del hospedador. Debe realizarse un examen seriado de deposiciones y debe cuantificarse el número de huevos para conocer el alcance de la infestación. Es de gran valor el diagnóstico rectoscópico, mediante el examen de la mucosa o por observación directa de los gusanos durante el prolapso.
Tratamiento
Actualmente, los imidazoles como el mebendazol y el albendazol tienen un buen efecto terapéutico (90-95%). El mebendazol a dosis única de 500 mg es más efectivo que el albendazol a una dosis de 400 mg7. Sin embargo el albendazol (400 mg) combinado con ivermectina (200 µg/kg.) produce una reducción en el número de huevos del 94%8. Sin embargo, es necesario tener en cuenta que los imidazoles no deben usarse en recién nacidos y es necesario tener precauciones con los de menos de un año, aunque en estos niños es muy rara la parasitación sintomática.
Profilaxis
La eliminación adecuada de los residuos fecales, reduce la contaminación del suelo y por lo tanto se reduce la prevalencia y la intensidad de infestación. Esto debe ir acompañado de unos buenos hábitos de higiene personal. A modo individual, se aconseja lavar cuidadosamente las verduras y ciertas frutas antes de su consumo, y en los niños debe crearse el hábito de lavarse las manos después de jugar con tierra y antes de ingerir cualquier alimento.
0 Comentarios